Por Jonathan Novak
Plutona es un cómic ya concluido, compuesto por únicamente cinco números, los cuales pueden ser encontrados hoy en día en un único volumen. La historieta de Image Comics, escrita por Jeff Lemire, cuenta con dibujos de Emi Lenox y el entintado es realizado por Jordie Bellaire. En esta pequeña historia se nos introduce a un mundo fantástico pero parecido a muchos otros, donde superhéroes y supervillanos se enfrentan en constantes escaramuzas.
A pesar de encontrarnos en una historia donde los superhéroes existen y en un medio donde estas historias son probablemente las más solicitadas, “Plutona” no viene a hablar sobre la heroína del mismo nombre, sino de aquellos que viven al margen de estos universos. “Plutona” sigue la historia de 5 chicos los cuales tienen la mala fortuna de encontrarse con el cadáver de la más grande heroína de ciudad Metro.
El cómic, como puede esperarse dada la temática, tiene un tono oscuro, los jóvenes son enfrentados a una situación no sólo traumática, sino problemática, ya que la simple existencia de Plutona mantiene una suerte de estatus quo en la ciudad, y la noticia de su muerte podría causar un desbalance en el poder del bien y el mal, es por esto que los chicos se ven en la tarea de decidir qué hacer con los restos de la justiciera.
Además de mostrarnos los dilemas sufridos por el grupo de jóvenes, el autor se encarga de mostrarnos a Plutona en su faceta de persona común, esta parte recuerda en cierta manera a Peter Parker, un joven que a pesar de su utilidad para el pueblo, lucha para mantenerse a flote económicamente. Así pues, Plutona es en realidad una madre soltera que se ve obligada a trabajar en dos lugares distintos, todo esto sin considerar que debe atender a los llamados de auxilio de la ciudad, sin importar en qué horario sucedan. En cierta forma, Plutona es esta persona casi perfecta, cuya moral inquebrantable le impide aprovecharse de otros a pesar de tener toda la capacidad para hacerlo.
“Plutona” resulta una lectura rápida y entretenida, el enfoque, alejado de la lucha interminable entre el bien y el mal, resulta fresco para este tipo de cómics y aunque es algo corto, no te deja con la sensación de necesitar algo más.
La puerta falsa 